El diseño de la marca parte de la escritura espontánea y desenfadada a pincel del las palabras Porrón Molón. Está vinculado a la manera de tomar el porrón, la tradicional y popular forma mediterránea de compartir.
La fluidez de las curvas se ha mantenido en la digitalización de los caracteres y gracias a correcciones ópticas y de modulación de los grosores se ha conseguido mejorar el ritmo y la unidad del conjunto.